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Shane Smeltz
- Edad:
- 28
- Fecha de nacimiento:
- 29/09/1981
- Estatura y peso:
- 1.84m 80 kg
- Demarcación:
- Delantero
- Club:
- Gold Coast United
- Número internacionalidades:
- 33
Velocidad | 6/10 | |
---|---|---|
Regate | 6/10 | |
Remate | 7/10 | |
Visión de juego | 5/10 |
- Estadísticas en el mundial
-
- Partidos jugados:
- 3
- Partidos titular:
- 3
- Partidos suplente:
- 0
- Minutos:
- 287
- Goles:
- 1
- Goles penalti:
- 0
- Asistencias:
- 1
- Tarjetas amarillas:
- 0
- Tarjetas rojas:
- 0
Su nombre sólo es conocido por los estudiosos y fanáticos, pero este delantero se ha revelado como un prolífico goleador gracias a su pasmosa habilidad para perforar metas rivales
Ser neozelandés, joven, gustarte el deporte y no dedicarte al rugby o al cricket no suele ser muy común en el lejano archipiélago bañado por el Pacífico, el Mar de Tasmania y el Océano Antártico. Quizás por eso, la estrella de su selección de fútbol nació en Alemania, en Göppingen más en concreto, y guarda en su pasaporte doble nacionalidad. Su nombre, Shane Smeltz, sólo es conocido por los estudiosos y fanáticos del fútbol, pero este delantero centro de 185 centímetros se ha revelado como un prolífico goleador gracias a su pasmosa habilidad para perforar metas rivales y se ha convertido sin duda en una de las piezas más peligrosas que presentará el de ataque de la modesta Nueva Zelanda en el Mundial de Sudáfrica.
Smeltz ha sido uno de los principales artífices de que los 'All whites' -hasta en el nombre intenta la selección de fútbol diferenciarse de los famosos 'All blacks' de rugby- regresen a una cita mundialista, por la que no aparecían desde España 82. Eso sí, el camino ha sido más fácil tras el pase de Australia al grupo asiático de clasificación en busca de una mayor competitividad.
El potente rematador anotó ocho tantos en los cinco partidos que disputó en la fase de clasificación, lo que lo convirtió en uno de los máximos goleadores del mundo en la competición preliminar. Aunque los rivales de los neozelandeses fueran endebles (Nueva Caledonia, Fiji y Vanuatu, y luego Bahrein en la eliminatoria decisiva), los números hablan a favor de Smeltz, un jugador que puede presumir de distintos récords en su carta de presentación.
Varios ejemplos: en 2009 y 2010 conquistó la Bota de Oro de la A-League (máxima competición del fútbol oceánico que disputan nueve equipos australianos y uno neozelandés), con 12 y 19 goles, respectivamente, en el seno de los Wellington Phoenix y los Gold Coast United, convirtiéndose así en el primer 'kiwi' que se hacía con el galardón individual en los 30 años de existencia de la competición. Mientras, con su selección anotó de forma consecutiva en seis partidos internacionales, con lo que igualó un récord que se estableció hace tres décadas.
Pero no todo han sido alegrías en la carrera de este delantero de 28 años que afrontará el Mundial en plena madurez: después iniciar su carrera en distintos equipos oceánicos (Gold Coast United, Napier City Rovers, Adelaida City, Adelaida United y Brisbane Strikers), Smelt intentó la aventura del fútbol inglés en 2005, siguiendo el camino inverso de las leyes que habían gobernado y administrado Nueva Zelanda durante muchos años y que todavía tienen reflejo en una bandera con destacados elementos británicos. Pero allí Smeltz sólo encontró cobijo en equipos de ligas menores: el Mansfield Town, el Halifax Town y el AFC Wimbledon, club semiprofesional del barrio de Wimbledon, en Londres, que fue fundado en 2002 por los ofendidos aficionados del sí histórico Wimbledon FC, tras mudarse este último a la ciudad de Milton Keynes y cambiar su nombre.
La titubeante carrera de Shane Smeltz en el fútbol de clubes varió por completó en 2007 al regresar a casa y firmar por con el Wellington Phoenix, el equipo de la A-League que entrena Ricki Herbert, también seleccionador nacional de Nueva Zelanda. Desde entonces le han llovido los títulos: nueve goles en 2008 lo auparon al segundo puesto de la lista de máximos goleadores de la liga, galardón que consiguió en 2009 con 12 goles y que ha repetido en la recién finalizada temporada, llevando su cuenta hasta 21. Por esta avalancha ante la meta rival, Smeltz ha recibido el título de Mejor Jugador de la A-League en las dos últimas temporadas y se ha proclamado Jugador Neozelandés del Año.
Su fichaje el pasado verano por el Gold Coast United, el que fuera su primer equipo en los inicios de su carrera, fue noticia en Oceanía, lo que ya es en si misma una gran noticia para un deporte poco popular en Nueva Zelanda, acostumbrado a estar siempre a la sombra del rugby, el cricket y hasta el baloncesto.
Nueva Zelanda confía en la habilidad de su '9' para despojarse del cartel de mera comparsa que llevará colgado en el Mundial de Fútbol de Sudáfrica, aunque la cita del verano pasado en el mismo país con motivo de la Copa Confederaciones no dejó mucho lugar para él ánimo: sólo pudieron arrancar un empate a cero ante Irak, tras caer ante Sudáfrica (0-2) y salir goleados por España (0-5). Por eso, conseguir marcar un gol en la cita mundialista es el sueño confesado que ronda la cabeza de Smeltz desde hace meses.
Su marca de 15 goles anotados en 26 partidos con su selección lo hacen fuerte, aunque los rivales de la primera fase son harto complicados: Italia, Paraguay y Eslovaquia.