Mundial Sudáfrica 2010

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Tim Cahill

Tim Cahill

Edad:
30
Fecha de nacimiento:
06/12/1979
Estatura y peso:
1.78m 68 kg
Demarcación:
Medio
Club:
Everton
Número internacionalidades:
41
Velocidad 7/10
Regate 7/10
Remate 9/10
Visión de juego 9/10
Estadísticas en el mundial
Partidos jugados:
2
Partidos titular:
2
Partidos suplente:
0
Minutos:
151
Goles:
1
Goles penalti:
0
Asistencias:
2
Tarjetas amarillas:
0
Tarjetas rojas:
1
posición de Tim Cahill

el análisis

Un auténtico australiano

Con un manejo notable del balón, su mayor virtud está en su capacidad para sorprender en el área desde su posición de centrocampista

La disposición para defender siempre los colores australianos hacen de Cahill el futbolista más querido en su país. / Archivo La disposición para defender siempre los colores australianos hacen de Cahill el futbolista más querido en su país. / Archivo
por Javier Bragado

La historia de Timothy Cahill ha estado plagada de inconvenientes y circunstancias adversas que han retrasado sus posibilidades de estar en un Mundial, pero que han contribuido a agrandar su leyenda en un país que le considera un héroe por encima de ilustres como Mark Viduka, Harry Kewell o Mark Bosnich.

El primer inconveniente que tuvo que afrontar fue nacer en Sydney, en un país en el que el fútbol es uno de los deportes con mayor número de aficionados pero en el que la evolución hacia la élite mundial está cercenada por el nivel medio. Allí, el rugby absorbe la mayor parte de los sueños infantiles y la influencia de sus primos podría haber sido decisiva (tres de ellos se dedican de manera profesional al deporte del balón oval). Ante este panorama, el adolescente Tim tomó la decisión de viajar a la tierra de su padre para labrarse un futuro profesional con el esférico.

Contaba con una incipiente carrera en Australia en equipos de su ciudad natal cuando el Millwall inglés le ofreció la oportunidad de viajar al Viejo Continente y con 16 años aceptó la idea de dar la vuelta al mundo para conseguir su sueño. "Mis padres sacrificaron casi todo lo que tenían para darme la oportunidad de triunfar. Si he podido llegar a ser futbolista profesional o a tener una vida mejor lejos de las calles es por ellos. Es la mayor motivación para lo que hago" reconoce el propio Cahill.

En la antigua metrópoli pulió sus condiciones y encontró en el rol del típico centrocampista inglés un guante al que se ajustaba perfectamente. Su gran despliegue físico, arrojo, determinación en balones divididos y su sobresaliente juego aéreo (a pesar de medir 1,78m) le permitieron ascender del equipo juvenil al senior del Millwall con el que fue clave en su ascenso a la Premier League y al que estará siempre ligado tras disputar 217 partidos y anotar 52 goles.

Su excelente rendimiento llamó la atención de clubes de mayor entidad que el londinense y llegó la hora de jugar a otro nivel. No obstante, Cahill rechazó la oferta del Crystal Palace por ser el enemigo tradicional del Millwall y se decantó por el Everton, en el que durante seis años, se ha transformado en una pieza clave de su centro de campo.

Sin embargo, el último paso no iba a resultar tan fácil. El haber sido uno de los jóvenes más destacados de su generación le llevó a una convocatoria de la selección sub'17 de Samoa Occidental (nacionalidad heredada de su madre) con sólo 14 años. El pequeño Tim jugó con 14 años su primer partido internacional en las eliminatorias de clasificación para los Juegos Olímpicos de 2004 en lo que sería una losa inesperada para su futuro.

Al haber disputado un partido oficial con los samoanos, sus posibilidades de jugar con Australia se cerraron por las reglas internacionales que impedían a un futbolista jugar con dos países distintos en su carrera. Diez años tuvo que esperar para que la FIFA abriera la mano con sus limitaciones y permitiera la excepción de aquellos que no habían disputado partidos oficiales con la selección absoluta poder alinearse con otro país. La noticia fue recibida con una gran sonrisa por Cahill, quien al fin podía ayudar a su país.

El rendimiento ha sido espectacular, con una media de más de dos goles por partido desde que debutara con 24 años. Además del reconocimiento de sus compatriotas (nunca ha rechazado una convocatoria) tiene el de los técnicos. "De lejos, es el mejor jugador que he tenido" reconoce Rale Rasic, el primer seleccionador que llevó a Australia a la fase final de un Mundial.

Con un manejo notable del balón, su mayor virtud está en su capacidad para sorprender en el área desde su posición de centrocampista. "Timmy es especial. Algunas veces consigue ser invisible en el área y siempre llega en le momento adecuado" ha reconocido Pim Verbeek, uno de los seleccionadores que ha tenido la posibilidad de dirigir a Cahill.

En Sudáfrica afrontar su segunda participación en la fase final de un Mundial (en 2006 anotó dos goles contra Japón). Esta vez será el líder y ha superado la grave lesión que condicionó su evolución en el anterior torneo. "Mi camino hasta dónde ha llegado hoy fue extremadamente difícil tanto para mí como para mi familia" repite de manera insistente el mediocentro. Al fin y al cabo su hermano pequeño, Chris, ha seguido sus pasos como futbolista pero su hermano mayor, Sean, ya ha pisado la cárcel por responder en la calles a insultos racistas en una refriega en la que dejó casi ciego a uno de sus ofensores.

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