Suiza y Honduras se despidieron de Sudáfrica tras un intrascendente empate sin goles en un partido caracterizado por la falta de puntería de los delanteros de ambas selecciones. Ambos equipos demostraron en su último partido que no estaban a la altura del Mundial, a pesar de que Suiza dio la campanada en la primera jornada del grupo con su sorprendente triunfo ante España. Honduras, por su parte, abandona con un punto, tras finalizar el torneo sin poder anotar un gol y con una aparente división entre los jugadores y el seleccionador, Reinaldo Rueda.

El técnico hondureño Rueda ordenó seis cambios respecto al equipo que se enfrentó a España y puso de titular al defensa del Anderlecht Víctor Bernárdez, quien lo criticó horas antes por sus decisiones a la hora de confeccionar el once. Rueda también alineó a dos jugadores que Bernárdez consideró que debieron haber jugado ante España: Edgar Alvárez y Hendry Thomas. Suiza, sin embargo, sólo introdujo dos cambios, y uno de ellos obligado tras la expulsión de Behrami ante Chile.

Suiza necesitaba el triunfo para tener alguna opción a octavos, pero fue incapaz de superar al equipo hondureño, que también falló en el último pase. La defensiva selección helvética, con muy poquito fútbol, estuvo cerca del gol en un par de ocasiones en la primera parte, pero no encontró portería. Al inicio de la segunda, en cambio, fue Suazo quien tuvo una clarísima oportunidad con un cabezazo que se marchó fuera y encendió las alarmas de Suiza. Aunque eran los helvéticos los que se estaban jugando el futuro, Honduras fue a buscar el partido tras el descanso, aunque careció siempre de claridad en el área rival.

El partido subió de voltaje con llegadas en ambas áreas, pero siempre con remates fallidos. La más clara del partido fue para Honduras, a los 71 minutos, cuando un avance de Suazo por derecha finalizó con un envío a Álvarez, que cabeceó solo. No fue gol gracias al gran desvío de Benaglio. Suiza siguió buscando un gol, pero falló constantemente, quizá por ansiedad, y ya sin ninguna esperanza, al saber que Chile caía ante España y que el equipo de Bielsa había marcado incluso un gol a la campeona de Europa.